El servicio de microbús comenzó a funcionar en Madrid en el año 1966, tras la desaparición de los efímeros trolebuses y con la empresa TRAINCO como concesionaria. Esta red de microbuses supuso un fuerte empuje al servicio de transporte público de superficie en Madrid: unía zonas del centro de la capital con vehículos ágiles y relativamente rápidos en comparación con los autobuses estándar y ofrecían prestaciones que la red normal de autobuses no podía.

El 21 de mayo de 1975, tras finalizar la concesión de TRAINCO, las líneas de microbuses pasaron a depender de EMT. Aquel día, para fomentar el uso de este servicio, se invitó a los usuarios a un viaje gratuito. Se mantuvieron la mayoría de las líneas establecidas, sus tarifas y durante un tiempo se siguieron utilizando también los mismos microbuses, tanto los Barreiros como los Austin Sava. La llegada de los Pegaso SAVA 5720, que TRAINCO había comenzado a utilizar minoritariamente, acabarían por hacer desaparecer a los Barreiros, al igual que en 1988, los SAVA 5720 fueron sustituidos por los Pegaso 5317, con algo más de capacidad y que también se utilizaban para algunas líneas periféricas.

A pesar de estos cambios, un año más tarde, la creación del Consorcio de Transportes y su normalización de las diferentes redes de autobuses de EMT abocaría a la desaparición a esta red de líneas M, que a su vez provocaría el nacimiento de algunas de nuestras líneas actuales y que os contaremos en un próximo post.